Bélgica
Deutschsprachige Gemeinschaft
16-09-2019
2019 - actualidad
En 2019, se estableció un Consejo Ciudadano permanente en Ostbelgien (Bélgica Oriental en alemán, la comunidad germanoparlante del país) para constituir la tercera institución democrática fundamental junto con el Parlamento y el Ejecutivo.
El 25 de febrero de 2019 todos los partidos del parlamento de Bélgia Oriental votaron para establecer un Consejo Ciudadano y una Asamblea Ciudadana. Sus principales objetivos son proporcionar a la ciudadanía no sólo una voz permanente en el proceso de toma de decisiones sino también un sistema de control para garantizar que sean escuchados. En última instancia el proyecto busca aumentar la rendicion de cuentas y revitalizar el poder de fijación de la agenda (agenda setting) de la ciudadanía.
Ambos órganos (el Consejo Ciudadano y las Asambleas Ciudadanas) están compuestos con el objetivo de representar a la población en términos de género, edad, educación y residencia. La nacionalidad belga no es un requisito, por lo que todo habitante de Bélgica Oriental puede ser reclutado siempre y cuando tenga al menos 16 años y no ocupe cargos políticos. La participación no es obligatoria, pero quienes participen tendrán sus gastos cubiertos más una pequeña dieta. En la actualidad, la fecha muestra que la tasa de aceptación de la iniciativa es del 10%, lo cual es un nivel alto para este tipo de experiencias.
Este mecanismo (conocido como el Modelo de Ostbelgien) fue diseñado con G1000, una plataforma para la innovación democrática y la democracia representativa deliviada.
El modelo consiste en una institución permanente (el Consejo Ciudadano) y una institución temporal (Asambleas Ciudadana o Panel Ciudadano). El Consejo Ciudadano (Bürgerrat en alemán) está compuesto por 24 personas, que ocupan el puesto durante 18 meses. Esto tiene dos objetivos: evitar los largos períodos como en los parlamentos tradicionaes y dar la oportunidad a cada ostbelga de participar en la institución.
Sus dos tareas principales son establecer el orden del día y preparar las Asambleas de Ciudadanos (Bürgerversammlungen en alemán). Esto significa que deciden los temas a tratar pero no emiten recomendaciones por sí mismos. En su lugar, hacen uso de procesos de deliberación ad hoc: determinan el tamaño y la duración de una Asamblea Ciudadana sobre un tema específico (unos 50 ciudadanos/as elegidos por sorteo trabajando durante tres fines de semana a lo largo de tres o cuatro meses). La Asamblea entonces emite recomendaciones al parlamento, que tiene que entablar un debate con ellos. Más tarde, el parlamento, el gobierno, la comisión pertinente y el ministro responsable elaboran una respuesta adecuada.
Fuente: Innovative Citizen Participation and New Democratic Institutions
Sin embargo, existe una gran limitación: los resultados de estas asambleas no son jurídicamente vinculantes sino meras recomendaciones, como se ha mencionado anteriormente. La constitución belga otorga todo el poder al parlamento, lo que significa que, a menos que se modifique y adapte la constitución para garantizar una democracia deliberativa más dirigida por los ciudadanos, sólo se pueden emitir recomendaciones no vinculantes. Además, Bélgica Oriental es una comunidad pequeña; una minoría en un país pequeño. Con sus 80.000 habitantes, es posiblemente la región más pequeña de la UE con poderes legislativos propios. Esto significa que el modelo podría enfrentarse a nuevos obstáculos si se aplica a gran escala.
Sin embargo, actualmente se considera un sistema avanzado de democracia deliberativa, y se ha presentado como un ejemplo para resolver la crisis política y de legitimidad de Europa en su conjunto. Además, algunas experiencias ya han tenido lugar a escalas mayores que Bélgicca Oriental. En Bélgica, las experiencias de democracia deliberativa están teniendo lugar en Bruselas y en el resto de país. En toda Europa, estas iniciativas están proliferando: las asambleas ciudadanas de Irlanda son el caso más paradigmático.
Más información:
- G1000
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