Descripción

Una comisión deliberativa es un lugar de debate entre parlamentarios y ciudadanos elegidos por sorteo (¼ de parlamentarios, ¾ de ciudadanos). Una comisión deliberativa puede ser convocada para tratar un tema que puede ser propuesto por uno o varios grupos políticos o por un ciudadano que introduce una sugerencia ciudadana. 

La selección de los ciudadanos se realiza mediante un doble sorteo. El sorteo permite involucrar a personas alejadas de la participación y la toma de decisiones. El sorteo se realiza a través de los números del registro nacional de ciudadanos de Bruselas. Pueden participar en el sorteo los residentes de la Región de Bruselas-Capital mayores de 16 años. No hay criterios de exclusión basados en la nacionalidad o el tiempo de residencia. En el primer sorteo, se envían 10.000 cartas a las bruselenses seleccionadas al azar. A continuación, se realiza el segundo sorteo entre las personas que respondieron al primer sorteo. Este segundo sorteo selecciona a las participantes que formarán parte del Parlamento durante las comisiones deliberantes, así como a sus suplentes. Sirve para compensar las desigualdades de participación y tiene en cuenta los siguientes criterios sociodemográficos: sexo, edad, distribución geográfica, lengua, nivel de estudios.

El proceso de deliberación se divide en tres etapas: la fase de información, la fase de deliberación y la fase de votación. Estas tres etapas van precedidas de una fase preparatoria.

Tras el segundo sorteo, está prevista una sesión informativa sobre el proceso para los participantes y los parlamentarios. El objetivo de esta sesión informativa es explicar las diferentes etapas del proceso, con especial atención a la publicidad de los debates y a la cuestión del anonimato, y examinar cualquier apoyo específico que pueda ser necesario. Se presta especial atención a cuatro grupos destinatarios que tienen menos probabilidades de responder: los jóvenes, las personas más alejadas de la participación y la toma de decisiones, las personas con discapacidad y las personas con hijos pequeños. Para estos grupos se prevén sesiones informativas específicas y otras medidas.

En las primeras reuniones, los expertos presentan una hoja informativa a los participantes y a los parlamentarios. Se organizan audiencias de diversos actores para contribuir a la apropiación y conocimiento del tema.

A continuación, la fase de deliberación separa a los participantes en pequeños grupos para que puedan deliberar y formular recomendaciones que luego se pondrán en común.

Tras varias reuniones de la comisión de deliberación, los parlamentarios y los ciudadanos proponen conjuntamente recomendaciones que se tratarán en el parlamento. Las recomendaciones pueden dar lugar a legislación, preguntas al gobierno y, por tanto, orientar las decisiones políticas. En un plazo de 6 meses tras la finalización de la comisión deliberativa, los parlamentarios que han participado en ella están obligados a hacer un seguimiento de las recomendaciones, que se presentarán públicamente a los ciudadanos que han participado en la comisión deliberativa y se publicarán en la plataforma democratie.brussels.